Hoy es mi cumpleaños, habiendo llegado a los 69 años de edad, sigo pensando que la vida es muy linda a pesar de todos aquellos achaques de la vejez, que podrían ser los pródromos del acercamiento a la Muerte. Todavía no he llegado a renegar de la vida y pedir a Dios que mejor me lleve. Creo que Él me tiene aquí en la tierra por una y mil razones, debo ser un poco megalómano al pensar en mí como algo muy especial, pero la realidad yo existo y eso dice bastante sin necesidad de que alguien me lo diga.
Siempre he sostenido que un ser humano desde el momento de su nacimiento tiene asignados dos celadores: Vida - Muerte, son un par de guardaespaldas invisibles que le acompañan día y noche, extremando las condiciones, estarán hasta en sus sueños, no puede hacerlos a un lado. Cada uno de ellos tiene un trabajo y deben realizarlo. Vida estará procurando constantemente mantenerlo a salvo de todos los ataques que puedan mermar o disminuir el buen vivir, su lucha perenne será mantenerlo vivo. Caso contrario, la Muerte, todo el tiempo permanece a la espera de cuando llegue el día donde la persona exhale el último suspiro, para ella no es difícil realizar su trabajo.
Sigo con Vida y eso le sigue dando significado a mi Vida ya con esto puedo seguir en este mundo y hacer todo aquello que aún me queda por hacer.

